En la espera, la Victoria! Por Paola Troz

Hace muchos años me encontré un papelito en uno de mis pantalones y la verdad no tengo ni idea de donde fué que salió. Traía inscrita una palabra donde Dios me recordaba la importancia de tener Paciencia y seguir creyendo…aún sin ver lo esperado. 

Recuerdo haberlo guardado y ocasionalmente lo leía y pensaba al hacerlo:

Necesito más paciencia, 

Necesito crecer en mi fe.

Por paciencia y fe es que se heredan las promesas… 

Había en esa época un ferviente deseo en mi corazón por algo en especial y continuamente oraba por ello.

Por un mejor lugar para vivir mi familia y yo.

La respuesta a mi oración tardaba más de lo que yo misma me hubiera imaginado, sin embargo durante ese tiempo recibí un entrenamiento tan maravilloso por parte de Dios que hoy  solo puedo agradecerlo.

Fui procesada para recibir la respuesta a mi oración.

Se trataba de mucho más que un mejor lugar para vivir.

El proceso de Dios en nuestras vidas es un regalo y una forma extraordinaria en la que Dios nos dice que por más grande que pueda ser el deseo de nuestro corazón hacia algo en especial, jamás puede superar Su Presencia y el regalo tan maravilloso que ya se entrego por nuestras vidas en una cruz.

Con EL nos basta.

El es suficiente y todo lo que necesitamos.

Cualquier otro deseo fuera de Dios es completamente superficial y pasajero

mientras que todo deseo en Dios es una tangible realidad de su amor y bendición!

El conoce nuestro corazón, conoce nuestra entrega.

El Procesa nuestras vidas de tantas maravillosas maneras.

“Porque Dios no es injusto como para olvidarse de las obras y del amor que, para su gloria, ustedes han mostrado sirviendo a los santos, como lo siguen haciendo. Deseamos, sin embargo, que cada uno de ustedes siga mostrando ese mismo empeño hasta la realización final y completa de su esperanza.  No sean perezosos; más bien, imiten a quienes por su fe y paciencia heredan las promesas.

Cuando Dios hizo su promesa a Abraham, como no tenía a nadie superior por quien jurar, juró por sí mismo,  y dijo: 

«Te bendeciré en gran manera y multiplicaré tu descendencia.» Hebreos 6:10

La victoria no está en recibir lo que tanto anhelamos de Dios,

La victoria está en que EL nos encuentre preparados para confiarlo y entregarlo  en nuestras manos.

Ese es el secreto de la conquista.

Entendiendo  que La victoria más grande de todas ya se conquistó en una cruz por la humanidad y al partir de este maravilloso principio, la espera no tiene porqué desesperar.

Aprendemos a entender algo vital

En la espera Hay Victoria!

En cada proceso de Dios en nuestra fe, maduramos!

La madurez trae beneficios que Dios premia, y la constancia también.

Los procesos de Fe en nosotros sirven para inyectarle a nuestro Espíritu vitaminas esenciales!

Jesús está siempre presente en cada proceso que vivamos , en cada inyección de fe que nos deban poner del cielo, el sujeta fuerte nuestra mano y nos recuerda que todo va a estar bien.

Ayer mientras limpiaba, y acomodaba las cosas en la tierra nueva que El Señor nos entregó, volví a encontrar el papelito aquel que tantas veces leí, no pude evitar llorar de alegría  porque  esta vez era desde un panorama diferente y con una gratitud tan grande en mi corazón al Rey de Reyes.

Una gratitud tangible y real de que Dios lo que promete, LO CUMPLE!

No dejes de creer. No dejes de esperar.

porque el cumplimiento del Todopoderoso VENDRA! 

El primer atardecer desde mi nuevo hogar.

El Señor se complace en los que le honran,

y en los que confían en su misericordia.

Jerusalén, ¡alaba al Señor!

Sión, ¡alaba a tu Dios!

El Señor refuerza los cerrojos de tus puertas,

y bendice a los que habitan dentro de tus muros.

El Señor mantiene en paz tus fronteras,

y te sacia con lo mejor del trigo.

Salmo 147:11 

Toda la GLORIA Es para EL!! 

Siempre Fiel JESUS!